Las Colonias escolares en Totana, una iniciativa pedagógica de solidaridad y compromiso (Por Juan Cánovas Mulero).

Las Colonias escolares en Totana, una iniciativa pedagógica de solidaridad y compromiso (Por Juan Cánovas Mulero).
Las Colonias escolares en Totana, una iniciativa pedagógica de solidaridad y compromiso (Por Juan Cánovas Mulero).

E n estos días en los que acaba de concluir el curso escolar se abre un amplio abanico de posibilidades para los chicos y chicas que están inmersos en un proceso educativo reglado. Ahora es el tiempo del descanso, de saborear las ofertas que acompañan al estío, de realizar ejercicios al aire libre, de asistir a campamentos, a escuelas de verano, de disfrutar de la naturaleza… pero también de compartir con familiares y amigos, de hacer del esparcimiento motivo de crecimiento personal e imaginativo.

Este proceder, hoy está normalizado y se reconoce como un derecho; no siempre ha estado al alcance de otra multitud de jóvenes que, durante siglos, en la temporada vacacional, contribuían a las necesidades de la casa. Tampoco para otros muchos que, incluso desde muy temprana edad, se responsabilizaban en diferentes trabajos, abandonando el colegio. En esas épocas en las que el ocio carecía del significado didáctico que tiene en nuestros días, surgieron iniciativas que aspiraban a ofrecer a los niños y niñas, sobre todo a aquellos con mayores carencias económicas, alimentarias, higiénicas… un periodo de expansión y adecuada nutrición en contacto con la naturaleza.

 Estas prácticas se concretaron en las Colonias escolares. Repasamos algunas de las actuaciones que se pusieron en marcha en Totana dentro de esa sensibilidad y recordamos a sus protagonistas. La realidad educativa en Totana en el siglo XIX. Luces que apuestan por el valor de la enseñanza. En la tradición de España el compromiso de las familias con el aprendizaje de los más jóvenes, sobre todo de las de una posición económica limitada, era muy escaso, pues los chavales pronto debían apoyar la frágil hacienda doméstica, con lo que su presencia en los centros formativos se reducía.

 En las primeras décadas del siglo XIX las corporaciones municipales, entre ellas la totanera, comenzaron a alentar la responsabilidad de los padres sobre la educación de los hijos. Así, en 1800 desde el ayuntamiento de Totana se señalaba que «la felicidad de los vasallos depende de que en su niñez se les dé la instrucción y enseñanza cristiana y política, únicos pozos de su existencia».

A la vez, eran conscientes de que, en tanto «que la mayor parte de sus vecinos, pobres jornaleros, no pueden soportar el pago mensual a los maestros y dejan abandonados sus hijos», debían promocionar acciones de cara a concienciar y mentalizar a los progenitores de la importancia y transcendencia de la ilustración, pero también ofrecer una enseñanza gratuita desde el propio municipio, propuestas que fueron madurando a lo largo de esa centuria. En 1833 se le encargaba al arquitecto Justo Millán Espinosa la «formación de un plano y memoria para la construcción de una casa escuela para 150 niños y habitación para maestro».

Lamentablemente el proyecto no llegó a término. Sin embargo, prosperaron en el casco urbano varias dependencias para atender la erudición de estos sectores de la población. Una sensibilidad social orientada a una educación integral de los más jóvenes acompañó la promoción de Colonias escolares. Una nueva generación de maestros y maestras se incorporaba al cometido docente en Totana en los primeros años del siglo XX. Su formación se había fundamentado no solo en adiestramientos culturales sino también en el conocimiento y valora ción de la configuración de la personalidad de los colegiales. Por un lado, sabedores del primordial protagonismo de esos aspectos, apostaron por desarrollar capacidades, habilidades, aptitudes… y, por otro, conscientes de las restricciones económicas y dificultades alimenticias que soportaban muchos de ellos, se implicaron en la organización de prácticas lúdicas en el medio natural. En el caso que nos ocupa su ámbito de aplicación, entorno de especial atractivo, fue el Santuario de La Santa, en donde, además, existía una infraestructura que facilitaba la estancia de los alumnos y la ejecución de los programas pedagógicos. Con estas premisas tomaban entidad las Colonias escolares que, aunque en Totana tuvieron sus primeros conatos en los albores del siglo XX, se conformaron con esencia propia a mediados de la década de 1920, según publica el diario El Liberal de Murcia, en su edición de cinco de febrero de 1928, fundamentadas en la seguridad de que «sus resultados son tan admirables y tanto cariño se siente por ellas, que se llena de alegría toda alma buena, que aspira a crearse una vida de amor y de cariño a la infancia desvalida».

 Desde esas perspectivas reflexionaban los docentes totaneros que «el pueblo culto tiene el deber de educar y hacer venturoso al niño que fisiológicamente exige un trato excepcional; el niño, sólo por existir, tiene derecho a una vida higiénica y saludable, que fortalezca sus músculos, que ensanche sus pulmones y a paraje donde el sol, el agua y el aire y una buena alimentación regenerasen su vida física empobrecida; misión encomendada y que llenan cumplidamente las Colonias escolares». Contaban para dar contenido a la iniciativa con el apoyo del «Ayuntamiento, de la Junta de Protección a la Infancia, de los maestros y de todos cuantos en la vida de esta ciudad signifiquen actividad y trabajo», prestos a cooperar «con entusiasmo a la realización de esta humana y caritativa obra». Todos ellos querían para «Totana la satisfacción y el orgullo de sumarse a esta cruzada de regeneración física y moral que se enseñorea de España entera». Continuando este primer impulso, apostando por su persistencia, creyendo firmemente en el valor que acompañaba este programa encontramos en Totana en la década de 1930 a profesionales de implicación y solidez, al lorquino Luis Pérez Rueda (1885-1950), a la aragonesa Carmen Baró Benedé (1896-1947), pero también a Carmen Díaz Sabater (Portman,1901-1976), a Josefa Gil Fores (Totana, 1906-1992)…

Totana Noticias -Linea Local